La saga «La Profecía» marcó la historia del cine de terror desde su estreno en 1976, en esta serie de películas el bien y el mal se enfrentan de forma épica.
Las películas
Comencemos por la película original, «La Profecía» (1976). Esta obra maestra del director Richard Donner nos presenta a Robert Thorn, un diplomático estadounidense que, tras la muerte de su hijo biológico, adopta a un niño llamado Damien. Sin embargo, una serie de eventos aterradores le hacen sospechar que Damien no es un niño normal, sino el mismísimo Anticristo. La película nos regala escenas memorables, como la muerte del fotógrafo decapitado por una placa de vidrio o el ataque de los babuinos a Robert Thorn.
En 1978, se estrenó «Damien: Omen II», donde un Damien adolescente ya conoce su verdadera identidad. La película explora la lucha interna del personaje mientras se enfrenta a su destino como el hijo del diablo. La escena en la que Damien descubre la marca del 666 en su mano es escalofriante y nos deja sin aliento.
La saga continuó en 1981 con «Omen III: The Final Conflict», donde un Damien adulto busca alcanzar el poder absoluto. Esta película, aunque no tan aclamada como las anteriores, nos ofrece escenas de gran impacto visual, como la batalla final entre Damien y el Arcángel Miguel.
Escenas Dramáticas
Estas son algunas escenas dramáticas que han hecho de «La Profecía» una saga tan memorable.
El despertar de Robert Thorn
La escena en la que Robert Thorn comprende que Damien es el Anticristo es una de las más impactantes de la historia del cine. La mezcla de horror, incredulidad y dolor en el rostro de Gregory Peck es inolvida
Damien se descubre a sí mismo
La escena en la que Damien, siendo adolescente, descubre la marca del 666 en su cabeza es un momento crucial en la saga. Es aquí donde el personaje acepta su destino como el hijo del diablo y comienza a desarrollar sus poderes demoníacos.
«La Profecía» es una saga que ha marcado a varias generaciones. Sus escenas dramáticas, llenas de horror y suspenso, nos han hecho reflexionar sobre la naturaleza del bien y del mal. Es un viaje al lado oscuro del cine que no deja indiferente a nadie.
